"¿Cuál será la última cara que vea? La última voz que escuche, la última palabra que salga de mi boca… ¿Cuál será el último pensamiento que ronde mi cabeza?
Y si hoy será la última vez que tropiece, la última vez que busque algo y en realidad lo tenga en la mano… la última vez que me haga llorar la tontería más grande y reviente a reír sin saber como ni por qué. ¿Qué pasa si hoy es el último día que puedo disfrutar de las pequeñas cosas de la vida? ¿Qué pasa si mañana me doy cuenta de que esas son las cosas que realmente importan…y ya es tarde?
Quizá mañana me levante sin saber que esa va a ser la última mañana que apague el despertador mil veces, que me levante tarde, que pierda el tiempo delante del armario. Quizá mañana, sea mi última mañana o quizá no… Lo peor de todo… es que sea o no, nadie me lo va a decir. Nadie me va a despertar esa mañana y me va a decir: “Disfrútalo, porque este es tu último día”.
Hoy me levanté con necesidad de perder el tiempo, de llorar de alegría, de hablar sin decir nada, quedarme sentada mirando las nubes y ver el tiempo pasar. Tengo ganas de saltar, reír, llorar, emocionarme. Quiero despertarme una mañana más y quedarme mirando al armario como si tuviera toda la mañana, buscar algo durante horas y tenerlo en la mano, tropezar, equivocarme… quiero disfrutar de esas pequeñas cosas sin importancia, que le dan sentido a la vida. Hoy me he dado cuenta de que todo esto es un regalo. El regalo más valioso que nadie te podrá hacer nunca, pero un regalo que se acaba. Hoy he decidido vivir cada segundo como si realmente fuera el último, vestirme cada mañana con la sonrisa mas grande que encuentre en mi armario y reírle a los problemas. Decidí comprarme una memoria nueva, que almacene solamente aquellas cosas que el día de mañana, me hagan sonreír, y me den fuerzas para luchar contracorriente en días de tormenta. Levantarme un día más, y vestirme con la sonrisa más grande del mundo."
-Andrea Amt (: